Ronnie Wood: Hey Negrita

Recordamos un episodio de las sesiones del disco Black And Blue

[Ricardo Portmán] @ecosdelvinilo

Se ha hablado mucho de ese período en tierra de nadie para el puesto de guitarrista de soporte en los Rolling Stones tras la marcha de Mick Taylor (1974-75). La aparición de Ronnie Wood fue providencial; tanto en los musical (como guitarrista no soportaba la comparación con Taylor, pero cumplía con el rol) como en lo vital (sabía vivir a la misma velocidad que Keith Richards), Ronnie ya era un Stone antes de entrar a la banda. Su llegada a las sesiones del elepé Black And Blue en Múnich las contaba el propio Woodie, con mucha gracia, en su autobiografía Memorias De Un Rolling Stone (Editorial Global Rhtyhm). Aquí les dejamos un fragmento que nos introduce en los Musicland y en esa primera canción compuesta por Ronnie que terminó siendo un ‘original’ Jagger/Richards.




«A pesar de mi amistad con Keith y Mick, no me importó realmente que los Stones estuvieran buscando entre más candidatos. La vida continúa, yo estaba de gira con los Faces y ellos necesitaban encontrar a alguien cuanto antes. Steve Marriott habría encajado muy bien en los Stones, era exactamente el tipo de persona que se habría llevado muy bien con ellos, pero Steve no era lo que podría llamarse un virtuoso de la guitarra. Lo suyo era el rasgueo, y lo que la banda necesitaba era un guitarra solista y rítmico. Por su parte, Jeff Beck era un guitarrista excelente, pero podía llegar a ser demasiado quisquilloso y la cosa no habría funcionado.

En Múnich, Clapton me dijo:

-Soy mucho mejor guitarrista que tú.
-Lo sé -respondí-, pero no se trata sólo de tocar con esos tipos, sino también de convivir con ellos. Y no creo que tú pudieras hacerlo.

Lo cual es cierto. Nunca habría sobrevivido a la convivencia con los Stones.

Algunos de los que querían formar parte de la banda eran americanos, como Wayne Perkins. Keith me dijo que les encantaba el estilo de Wayne, pero que tenían dudas sobre su capacidad para encajar en el grupo. No estaban seguros de que pudiera convivir con ellos, ni de si entendería su sentido del humor. Después de todo, los Stones se toman muy en serio su condición de banda inglesa, y para llevarse bien con ellos tenías que saber relacionarte con ellos.

Ni siquiera resultaba fácil para los candidatos ingleses. Keith tocaba con algunos de aquellos grandes músicos y luego les decía: ‘Eres un capullo, largo de aquí’. O: ‘Podría trabajar contigo, no te vayas muy lejos’. Pero no los despachaba sin antes haber registrado su actuación para que Mick consiguiera los cortes que quería grabar.

Entonces llegó mi turno.

Entré en el estudio, miré uno por uno a Mick, Keith, Bill y Charlie y anuncié:
-Tengo una canción. Ya la he tocado antes para vosotros. Tocaremos ‘Hey Negrita’. ¡Vamos allá!

Y Charlie dijo:

-Acaba de llegar y ya se pone mandón.» |



Copyright © 2016 Ecos del Vinilo.

Todos los derechos reservados. Prohibida la reproducción total o parcial sin previa autorización del autor.